sábado, 16 de enero de 2010

1984–85: Pepsi, "We Are the World" y otros emprendimientos



El 27 de enero de 1984, Michael filmó un comercial para Pepsi Cola junto a otros miembros de su familia, en el Shrine Auditorium. Durante el rodaje del mismo, el cantante sufrió quemaduras de segundo grado en su cuero cabelludo y parte de su rostro debido a que la pirotecnia que utilizaban en una escena que simulaba ser un concierto tuvo una explosión mayor a la esperada. Después de este episodio, Pepsi acordó mediante un trato extrajudicial otorgarle un millón y medio de dólares como resarcimiento económico por las heridas que sufrió. Este dinero que recibió lo donó al Brotman Medical Center de la ciudad de Culver, California, donde él había sido asistido.

El 14 de mayo de 1984, Jackson fue invitado a la Casa Blanca para recibir un premio especial que le otorgó el entonces presidente estadounidense Ronald Reagan, por su trabajo humanitario. También en 1984, el artista ganó también ocho premios Grammy. A diferencia de sus siguientes álbumes, Thriller no fue acompañado por de una gira promocional. Sin embargo, en ese año el cantante realizó junto a The Jacksons el Victory Tour, gira de conciertos con que él ganó cinco millones de dólares y que luego donó a diferentes obras caritativas.

En 1985, junto a Lionel Richie y un extenso número de cantantes famosos, entre los que se hallan Stevie Wonder, Diana Ross, Tina Turner, Bob Dylan y Bruce Springsteen, entre otros, Jackson lanzó Usa for Africa, una producción musical que contenía el sencillo "We are the world", que reunió millones de dólares para ayudar a la población hambrienta de África y se convirtió en uno de los sencillos más vendido de la historia. En ese año, ATV Music puso a la venta los derechos de autor sobre las canciones más representativas del grupo The Beatles, compuestas en su mayoría por el dúo de compositores Lennon/McCartney, conformado por John Lennon y Paul McCartney. Jackson se interesó en comprar este catálogo de canciones después de haber trabajado con McCartney, a comienzos de los años ochenta. Finalmente, después de diez meses de negociaciones, Michael adquirió el catálogo, luego depagar 47 millones de dólares. Pero esto lo enemistó con Paul, ya que él también tenía intenciones de comprarlo.

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